Una puerta escamoteable se desliza y se oculta dentro del mueble al abrirse, lo que permite un acceso total al interior. Este tipo de puerta destaca por su eficiencia en espacios reducidos y su estética integrada.
Se utiliza comúnmente en cocinas, armarios y oficinas, ofreciendo una experiencia de uso fluida, cómoda y visualmente atractiva.